Martina
Fecha llegada: 11-06-2022
Martina apareció abandonada en el monte con uno o dos días de vida. Desnutrida, deshidratada y en fin de semana. Sus rescatistas no conseguían alimento adecuado y decidimos acogerla. Inmediatamente supimos que algo no iba bien con ella.
Dos días después de llegarnos sufrió una hipoglucemia debida a la desnutrición, y, aunque algo de leche iba tomando no la tomaba con normalidad. Explorando su cavidad oral descubrimos que no tenía paladar, Martina nació con paladar hendido o palatosquisis, una extraña condición que jamás ha sido trata en una cabra España.
Hospitalizamos a Martina mientras investigábamos casos que se hubieran tratado, la bibliografía al respecto era desalentadora, en el hospital no lo dudaban: eutanasia. Pero nos negamos, y encontramos a Tabby, una cabrita rescatada por un santuario de Los Ángeles con la misma condición que Martina, ellos nos asesoraron y nos contaron muchas de las dificultades por las que han pasado con Tabby, pero sorprendentemente y contra todo pronóstico Tabby había cumplido ya los 6 años, tras dos cirugías fallidas su defecto sigue abierto por lo que todo indicaba que había esperanzas para Martina.
Martina ya ha cumplido 6 meses, han sido meses alimentándola por sonda, teniéndola bajo supervisión 24 horas al día, una neumonía, muchas radiografías, y sustos, pero Martina sigue viva y cada vez se apaña mejor para comer y beber por si misma sin sufrir graves atragantamientos.
“Soy Martina, y si no me conoces ya estás tardando. La industria me dejó abandonada en el campo por mi enfermedad, pero la sociedad y la ciencia quisieron rematarme. Por suerte esta gente es muy pesada y se empeñaron en mantenerme con vida, he puesto mucho de mi parte siendo extremadamente maja y adorable, y por eso soy el ojito derecho de papá. Soy tan adorable que si quieres también puedo ser tu ojito derecho.”